La historia se repitió y multiplicó

El sábado pasado, 23 de julio, fuimos a Sarandí del Yí para realizar la obra de Teatro Foro "LA HISTORIA SE REPITE" creada por el grupo de mujeres del taller de Teatro del Oprimido de la biblioteca del barrio la Estación.

Fue mucho lo que se dio ese día, que se venía gestando desde hacía varios encuentros.
El objetivo era la multiplicación del Teatro del Oprimido, pasarles lo que nosotros trabajamos, para que ellas se apoderen y empoderen con esta metodología.
Bárbara Santos, curinga del CTO Rio, dice en el audiovisual Fábrica de Teatro Popular Nordeste (www.ctorio.org.br) a los participantes que el objetivo es pasarles la metodología y que una vez hecho esto es de ellos, significa realmente apropiarse...democratizar el acceso a los bienes de producción cultural no es solo un enunciado bonito y bien armado, ¡es acción!.

Este grupo de mujeres aprehendieron el Teatro del Oprimido, lo hicieron suyo...ensayaron, planificaron, armaron escenografía y vestuario, realizaron la difusión, se comprometieron; ¿por qué tanto compromiso? porque es algo de ellas. No para ellas, ni por ellas: DE ELLAS.

Ese día fue el cierre de un proceso y el comienzo de otro. Compartimos un almuerzo delicioso entre todas, en medio de la escenografía, en medio del ensayo y a eso de las 14hs empezaron a llegar las madres de la Escuela 19 para hacer las tortafritas y el café que se vendían en la entrada de la biblioteca con el fin de recaudar fondos para la escuela. A las 15hs ya empezaron a llegar las primeras espect-actrices y los primeros espect-actores.

Nos acompañaron el alcalde de Sarandí, representantes de la unidad de violencia de género de la Comisaría, y del sector de género de la Intendencia Municipal de Durazno.
Uno de los mayores intereses del grupo es que se cree en Sarandí del Yí un lugar específico para atender, orientar y acompañar a las mujeres víctimas de violencia doméstica.

La participación fue incansable, sumamente enérgica y quienes no participaron con la palabra o con el cuerpo en escena, asentían permanentemente con la cabeza...

Y ocurrió algo inesperado, realmente inesperado -como lo que suele ocurrir con el Teatro Foro-. Un hombre pidió para participar, le dijimos que sí, ya que habían participado muchas mujeres, él podía hacerlo ahora. Cuando entra en escena pide el lugar de uno de los opresores, y me desarma (a quien estaba dirigiendo el foro)...mediante preguntas vamos llegando a por qué no puede reemplazar a un opresor, vamos llegando a que sería una solución mágica...aún así insiste y en fin...ya estaba en la escena. Bien, ¡que pruebe! después analizamos... en la escena original el personaje opresor le recrimina a la mujer que el mate está frío, que ella nunca hace nada bien.
Palabras más o menos está fue su intervención: "Vieja, sabés que estaba pasando por la puerta de la estación y vi que había una obra de teatro...y me metí a ver" "¡Claro, nunca me invitas a nada! nunca puedo salir" "Pará vieja, escucha. Me metí porque no sabía lo que era, pasé y quería conocer...y estuvo buena la cosa. Me dejó pensando mucho..." "¿Sí? ¿Y en qué pensaste?" "Y viste que uno es así, que uno es también como lo han criado, y por ahí no se da cuenta de algunas cosas. Pero viendo la obra me di cuenta de cosas, de cosas que no están bien...¿Sabés qué? dejá, dejá que el mate lo preparo yo"
¿Solución mágica? ¿Cambio posible?

A nosotros nos emocionó y estallamos en un aplauso, sincero y agradecido, a todas y todos los que trabajaron para ese día.
Al grupo que va a seguir trabajando, que ya tiene invitaciones para hacer la obra en varios lugares...porque el tema es algo que se da mucho...

¡Lo que también se da mucho en Teatro Foro, es el intercambio, la discusión, el compromiso...el ensayo de alternativas, la posibilidad de que algo cambie!

Gracias Micaela, Graciela, Sandra, Selva, Ernestina, Teresa, María; y a Macarena y Magaluna coordinadoras de Centros MEC, por el apoyo que brindan desde hace años a la multiplicación del Teatro del Oprimido.